jueves, 27 de noviembre de 2014
jueves, 13 de noviembre de 2014
jueves, 20 de febrero de 2014
TIPOS DE ORACIÓN
Las cinco formas principales de oración son la bendición, la adoración, la oración de petición y de intercesión, la oración de acción de gracias y la oración de alabanza. Con cualquiera de ellas elevamos nuestro espíritu a Dios según nuestras necesidades.
La bendición
Una bendición es una oración que pide la bendición de Dios sobre nosotros. Toda bendición procede únicamente de Dios. Su bondad, su cercanía, su misericordia son bendición. La fórmula más breve de la bendición es “El Señor te bendiga”.
La adoración
Toda persona que comprende que es criatura de Dios reconocerá humildemente al Todopoderoso y lo adorará. La adoración cristiana no ve únicamente la grandeza, el poder y la Santidad de Dios. También se arrodilla ante el amor divino que se ha hecho hombre en Jesucristo.
La petición
Dios, que nos conoce completamente, sabe lo que necesitamos. Sin embargo, quiere que “pidamos”: que en las necesidades de nuestra vida nos dirijamos a Él, le gritemos, le supliquemos, nos quejemos, le llamemos, que incluso “luchemos en la oración” con él.
Ciertamente Dios no necesita nuestras peticiones para ayudarnos. La razón por la que debemos pedir es por nuestro interés. Quien no pide y no quiere pedir, se encierra en sí mismo. Sólo el hombre que pide, se abre y se dirige al origen de todo bien. Quien pide retorna a la casa de Dios. De este modo la oración de petición coloca al hombre en la relación correcta con Dios, que respeta nuestra libertad.
La intercesión petición por los demás
Del mismo modo que Abraham intercedió a favor de los habitantes de Sodoma, así como Jesús oró por sus discípulos, y como las primeras comunidades no sólo buscaban su interés “sino todos el interés de los demás” (Flp 2, 4), igualmente los cristianos piden siempre por todos; por las personas que sin importantes para ellos, por las personas que no conocen e incluso por sus enemigos.
La acción de gracias
Todo lo que somos y tenemos viene de Dios. San Pablo dice “¿Tienes algo que no hayas recibido?” (1 Cor 4,7). Dar gracias a Dios, el dador de todo bien, nos hace felices.
La mayor oración de acción de gracias es la “Eucaristía” (en griego “acción de gracias”) de Jesús, en la que toma pan y vino para ofrecer en ellos a Dios toda la Creación transformada. Toda acción de gracias de los cristianos es unión con la gran oración de acción de gracias de Jesús. Porque también nosotros somos transformados y redimidos en Jesús; así podemos estar agradecidos desde lo hondo del corazón y decírselo a Dios en muchas formas.
La alabanza
Dios no necesita de ningún aplauso. Pero nosotros necesitamos expresar espontáneamente nuestra alegría en Dios y nuestro gozo en el corazón. Alabamos a Dios porque existe y porque es bueno.
martes, 7 de enero de 2014
Papa Francisco: conocerlo, apreciarlo y quererlo
Papa Francisco: conocerlo, apreciarlo y quererlo
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Padre Lombardi: el Papa “no busca fama o éxito, porque hace su servicio para anunciar el Evangelio”
Padre Federico Lombardi S.J., director de la Sala de Prensa de la Santa Sede, ha comentado positivamente y sin sorpresa el anuncio de la directora del prestigioso semanal estadounidense, Nancy Gibbs.
“La decisión no sorprende, teniendo en cuenta la resonancia y la gran atención despertadas por la elección del Papa Francisco y por el principio del nuevo pontificado” ha explicado Lombardi.
Según el portavoz vaticano, “es una señal positiva que uno de los reconocimientos más prestigiosos en el ámbito de la prensa internacional se atribuye a quien anuncia al mundo valores espirituales, religiosos y morales y habla resueltamente a favor de la paz y de una mayor justicia”.
Padre Lombardi ha añadido que el Papa “no busca ni fama ni éxito, porque cumple con su servicio anunciando el Evangelio del amor de Dios por todos.
“Si esto atrae a los hombres y a las mujeres y les da esperanza, el Papa está contento. Si esta elección como ‘Hombre del año’ significa que muchos han entendido -por lo menos implícitamente- este mensaje, él seguramente, se alegra” concluyó padre Lombardi.
El escudo y el lema del papa Francisco
El escudo y el lema del papa Francisco
El papa Francisco ha
elegido ya sus nuevos símbolos, que lucirán en todas las comunicaciones
y actos oficiales del pontífice, además de en lugares concretos como
los jardines vaticanos. Tanto el escudo como
el lema son los mismos utilizados desde su consagración episcopal. El
primero tiene fondo azul y lleva los mismos distintivos de la dignidad
pontificia de Benedicto XVI: mitra colocada entre dos llaves de oro y plata en forma de cruz, unidas por un cordón rojo. En lo alto campea el emblema de la orden del papa: la Compañía de Jesús: un sol radiante,
con el monograma de Cristo en rojo. La letra H lleva una cruz encima y
las puntas son tres clavos negros. Abajo, una estrella y una flor de
nardo. La estrella, según la tradición heráldica, simboliza a la Virgen, Madre de Cristo y de la Iglesia, mientras que la flor de nardo
remite a San José, patrono de la Iglesia universal. "Con esos símbolos
el papa manifiesta su amor por la Virgen y San José", explican desde la
Santa Sede.
El lema: «Miserando atque eligendo» (Con sentimiento de amor y lo eligió)
procede de un pasaje de una homilía de San Beda el Venerable,
comentando el relato evangélico de la vocación de San Mateo. Tiene un
significado especial para el papa Francisco, ya que a los 17 años, en la
festividad de San Mateo en 1953, después de confesarse, percibió la
misericordia de Dios en su vida y sintió la llamada al sacerdocio
siguiendo el ejemplo de San Ignacio de Loyola.
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